He tenido el gusto de trabajar con Lucho, su experiencia, conocimiento, su insaciable necesidad de aprender y mejorar día tras día, hace de él una persona que vive el pensamiento ágil desde su ser. Lo que se refleja en su trabajo cotidiano con los equipos de desarrollo, la organización, sus compañeros de trabajo, los talleres de formación, coaching y mentoring a equipos y personal directivo. Transformando estos espacios en lugares de mejora continua, acompañados con su generosidad al compartir conocimiento. Sin duda alguna ser parte de cualquiera de sus talleres es una experiencia maravillosa.